jueves, 23 de junio de 2011

El Uno Invisible


Sat Nam, Un cordial saludo y que gocen de la energía del solsticio de verano y la usen un poco o mucho para conectar con el Invisible que es otro de los miles de nombres que se le dan a Dios. Las cosas sutiles e invisibles a veces se nos revelan con la intención de que aprendamos a confiar en el Uno que nos formó, así veras que a lo largo de tu vida recordaras eventos que te sacan de lo lógico y te llevan a lo mágico, cada evento es como un koan del Zen que te detiene y te mantiene perplejo y azorado al realizar lo magnifico de lo que nuestro gran amigo el Uno es, con esas experiencias llegas a realizar que su poder es lo que prevalece a pesar de nuestras intenciones o planes, lo desconocido es el 80% de las cosas que van a suceder, y a veces creemos y nos comportamos como si nosotros lleváramos el control o supiéramos que es lo que va a ser. Cuando tenía unos 12 años una vez fuimos al mar, cerca de Los Mochis Sinaloa que es donde yo nací, tenemos un puerto que se llama Topolobampo, y hoy en día estas ahí en tan solo 15 minutos de manejo, una vez que veníamos de regreso en la carretera, después de pasarnos todo un día en la playa, venia una moto con 2 personas que nos alcanzaron y manejaban justo atrás de nosotros, los veía fijamente y después de un rato, un pensamiento me llego y empezó a pensar, " se van a caer, se van a caer, se van a caer" y de repente el joven que manejaba la moto empezó a perder el control y luego se cayeron, quede sorprendido, afortunadamente pude ver que los 2 se levantaban y uno de ellos movía su pie con dolor mas no se veía que se le hubiera quebrado, los fuimos dejando en la distancia y me preguntaba qué había sucedido, si yo lo había causado lo cual me hacía sentir muy mal o si había visto el futuro inmediato, no encontré una explicación lógica a esto, no sabía que la mente individual es parte de la mente universal y ahí quedo la experiencia. En esa ciudad viví hasta los 15 años, en esos días estaba con unos tíos y terminaba la secundaria, después me encontré por tierras californianas en donde conocí a Yogui Bhajan a los 19 años de edad más o menos, y la magia continuo ya que cada vez que se cruzaba uno con él, sucedían eventos extraordinarios que tenían como propósito el ayudarnos a despertar nuestra conciencia.

Había pasado mucho tiempo de que no había visto a uno de mis tíos de Sinaloa, y una vez estando en Guadalajara Jalisco, sucedió que la madre de ellos enfermo, ella se vino a vivir a Guadalajara con su hermana mi abuela Inés, estuvo aquí varios meses y cuando finalmente decayó fue internada en un hospital llamado "de Occidente"
El día en que ella murió, mi padre había tomado mi carro, yo casi nunca andaba en camión, pero en esa ocasión, salí a tomar uno para ir a ver a mi abuela, ese camión pasaba por el hospital de occidente y justo cuando el camión estuvo frente al hospital que era una esquina "T" daba la vuelta en esa esquina, justo en ese instante cuando el camión se movía hacia la izquierda yo iba parado tomado del tubo y bobeando con la gente que iba en él, cuando de repente volteé la cabeza hacia la ventana y vi salir a mi tío Héctor que no veía en mas de 20 años, y lo vi solo por unos 2 segundos pues él se voltio a tomar un teléfono y de repente me quedo de espaldas, pedí el alto inmediatamente y al bajar del camión lo llame, ¡Héctor! se voltio, me reconoció y me dijo, “mi madre acaba de morir hace 5 minutos”, entonces lo abrace y lloro en mis hombros y lo estuve consolando a la vez que no dejaba de pensar que si no hubiera volteado a ver hacia el hospital, o si lo hubiera hecho 2 segundos después no lo hubiera visto, además que pude haber estado viendo hacia muchos otros lugares, pensé que ese encuentro había sido planeado por una fuerza desconocida llamada Dios.

En esos tiempos tenía un negocio de jugos en Plaza del Sol, y un día cuando acomodaba un costal de naranjas se me acerco un joven y me dijo, perdón, ¿Me pudiera tomar una foto con usted? que es algo que seguido me piden porque soy el único en Guadalajara que usa turbante ya que soy sikh, pero mucha gente piensa que soy de la India o de Arabia, y al pensar que soy extranjero, me piden fotos, así que le dije, Claro que sí, pero en eso lo que me sorprendió fue el ver que no era solo el joven, ya que dijo, ¡vengan!, y en eso toda una familia de unas 10 personas o mas se fueron a parar junto a mi y así me tomaron esa fotografía, me dieron las gracias y se fueron,......pasaron unos 5 años y un día fui a visitar a mi abuela Inés y cuando llegue a su casa la sorpresa era que otro tío, Víctor, hermano de Héctor estaba también ahí visitando, nos saludamos y platicamos, pero al cabo de un rato me dijo, “Oye, por cierto, una vez fui a visitar a un amigo a su casa allá en Mochis y cuando estaba con él me dijo, mira “déjame enseñarte las fotografías que me tome en Guadalajara”, en eso saco una y dijo " esta nos la tomamos con un hindú" y se rio, y cuando la vi, le dije, "pues este no es hindú, es mi sobrino Ravi Nam" y se rio, y pensé, ¡wawww!, creo que el Guru me está tratando de enseñar como da la vuelta la ley del Karma, de que todo lo que hacemos se nos regresa, y lo que te toca te toca, y lo que El desea para ti prevalece a pesar de ti. aunque Yogui Bhajan decía, que a veces cuando usabas tu libre albedrío, tu solito te metías en problemas, aunque también lo escuche decir que ya estaba escrito hasta el último penny que ibas a recibir, así que aún hay muchos misterios divinos que aún hay que comprender.
Y hablando de Sinaloa, cuando tenía unos 25 años fui a visitar a Hermosillo a mi hija Shakti, había volado de Guadalajara pero había decidido regresarme en tren, que en ese tiempo le decían el tren bala, allá estuve conviviendo con un amigo de la institución GFU que se llama Fausto Muñoz que por cierto, hace años no veo, me despidió en la terminal y su hermano me regalo un libro que se llama "A los pies del maestro" de Alcione o Krishnamurti, lo fui leyendo toda la noche, como iba en camerino, la cama estaba muy cómoda, me dormí leyéndolo, pero por allá en la madrugada, algo me despertó, de algún modo me había deslizado y me había pegado en la cabeza, no me dolía nada, solo que el golpe me despertó, me levante y vi que el tren se iba deteniendo lentamente, me asome por la ventana , a lo lejos veía una casita de campo con luces encendidas en el medio del monte, y pensé, "creo que llegamos a algún pueblo y recogeremos pasaje" había un gran silencio, así que cerré la ventana y me dormí, pero al despertar , que serían como las 7 y media de la mañana tal vez, me asome nuevamente por la ventana del tren solo para ver un soldado con su fusil al lado de mi ventana, lo cual me molesto y pensé, "yo creo que andan revisando el tren y han de andar buscando a alguien”, así que me acosté otra vez, al cabo de varios minutos alguien abrió mi puerta y pensó que estaba dormido diciendo "este viene bien dormido" a caray, pensé ,¿Por qué se meten a mi camerino? así que al rato escuche mas voces en el pasillo del tren y alguien dijo, "es que se descarrilo" cuando oí eso pensé, "chale, yo no llegamos" así que me levante y me bañe, esos baños de ese tren eran muy cómodos, para tren, estaban muy bien, al salir me encontré con un joven en el pasillo y le pregunte ¿qué paso? sorprendido me contesto ¿que no has visto? No le dije, entonces se bajó junto conmigo y me enseño, caray lo que había ante mí, eran varios vagones unos encima de otros y las vías destrozadas, a lo lejos pude ver que bajo un árbol estaban los cuerpos de unas 20 o 30 gentes tal vez o mas cubiertas con sabanas ensangrentadas al lado de una ambulancia y a una enfermera que de pie tomaba notas. Un helicóptero volaba aun por el lugar.
El vagón en el que yo iba, tenía la llanta de adelante derecha en la vía y la izquierda levantada unas 3 pulgadas, las 2 de atrás estaban bien sobre las vías, y el vagón que iba adelante se había salido de las vías hacia la derecha hacia abajo, pero había quedado con las ruedas de atrás sobre las vías la rueda derecha sobre la vía y la rueda izquierda totalmente levantada, así que después de analizar la situación como virgo que soy, llegue a la conclusión de que fui muy afortunado porque desde el vagón el que yo iba hacia atrás todo estaba bien, sentí que había sido protegido por Dios, y para cuando descubría todo lo antes dicho ya todos los heridos habían sido recogidos, no era mi momento otros fueron llamados ese día, siempre que salgo de viaje hay un mantra que canto que es de protección, que va, “Ad Gure Name, Yugad Gure Name, Sat Gure Name, Siri Guru De Ve Name” Que significa, Al principio estaba Dios, A través de los tiempos estuvo Dios, El Verdadero Dios Luminoso, El Gran Dios Luminoso Divino” este mantra si funciona. Se recomienda recitarlo una vez al encender tu carro y te aleja de los accidentes, o varias veces si el viaje va a ser largo.

Podemos influir sobre los eventos usando el poder de la palabra, nosotros le decimos la ciencia del Naad Yoga, parte fundamental de la ciencia del Kundalini Yoga, Guru Nanak Ji quien viviera hace 500 años nos enseñó el Llap Lli, son 40 estrofas en una de ellas, la numero 33 dice así:

Sin poder para hablar,
Ni poder para estar en silencio.
Sin poder para rogar, ni poder para dar.
Sin poder para vivir, ni poder para morir.
Sin poder para enriquecerme o iluminar mi mente.
Sin poder para obtener Conocimiento Divino
Ni poder para encontrar la liberación.
Mediante su propia voluntad, O Nanak,
Nadie puede ser bueno o malo.
Solo Él tiene el poder para mostrarnos el camino. (33)


Aakhan llor, Chupe na llor,
Llor na mangan den na llor
Llor na llivan maran na llor
Llor na raaj maal man sor
Llor na surti guiaan vichaar
Llor na yugti chute sansaar
Llis hath llor kar vekhe so-e
Nanak utam nich na ko-e



Yogui Bhajan decia si la recitas 25 veces al día no hay nada en esta tierra que no puedas tener.
Sat Nam Saludos a todos y muchas bendiciones,

Ravi Nam Singh Khalsa


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